La moda cambia y mucho. Pasamos de los estilos super soft, nórdicos, con materiales como el lino, algodón, telas de saco… y colores neutros, grises, arenas, blancos y todo acompañado con madera natural… a un estilo totalmente opuesto, mucho mas elegante. Nos decantamos por telas cargadas y colores mas vivos, buscamos espacios con luz tenue, buscando incluso algún espacio con algo de oscuridad donde relajarse. ¿Los materiales? Metalizados, dorados desgastados y sí! la madera también es importante, pero con un acabado trabajado.

Dentro de todo este cambio, el terciopelo es el que obtiene el protagonismo. Lo encontramos en todo tipo de mueble, sofas, cojines, taburetes e incluso en los cabeceros de cama.

Pero hay que tener cuidado al decorar un espacio, ya que se puede pasar la línea del exceso fácilmente. Hay que encontrar el equilibrio, la base natural y sencilla combinado con toques mas recargados, ese es el punto que hay que encontrar.

A mi personalmente me encanta esta nueva tendencia, me encanta una casa con un poco de color, con vida. Permite dejar volar la imaginación… combinar muebles de distintas épocas y ¿por qué no? Tener espacios un poco más elegantes y atrevidos.

        

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